Aun en fase de borrador de anteproyecto de Ley, el Ministerio de Justicia español está preparando lo que parece una nueva ley que permitirá en ciertos casos, autorizar a los cuerpos de seguridad infectar equipos con troyanos para espiar el contenido de los discos duros o de las memorias.
En España, el actual código penal que se está reformando, del que ya ha dado bastante que hablar, no permite este tipo de intervención en equipos de sospechosos ya que vulnera el derecho básico de la intimidad. Teniendo en cuenta que tal sospechoso aun no está llamado a declarar ante un juez o está imputado de ninguna manera. El cambio en el Código Penal podría permitir que si una persona está bajo investigación, se le pueda espiar.
Jurídicamente es un tema muy espinoso, está por un lado el derecho a la intimidad y por el otro una forma rápida de encontrar pruebas para poder juzgar a algún sospechoso. Pero es evidente que el derecho a la intimidad debería estar por encima de todo, hay ejemplos en otros países que dejan claro que esto no siempre es así, por ejemplo la Ley Patriota de EE. UU., puesta en vigor tras los ataques del 11-S en Nueva York.
El uso de esta reforma estaría centrada especialmente en investigar posibles delitos que estén penados con más de tres años de cárcel o a delitos que tengan que ver con terrorismo o con crimen organizado.
Afectaría a PCs, tablets y smartphones mediante la vía del troyano, un virus que se instala sin el consentimiento del sospechoso y que permitiría a las fuerzas de seguridad revisar el contenido de la memoria sin que se percate de nada. Algunos de los troyanos usados por la Policía son capaces de poder examinar el contenido de la memoria, pero también almacenar las contraseñas que se van guardando, permitiendo así el acceso a todo tipo de cuentas
El Ministerio de Justicia ha confirmado que este borrador existe y se está estudiando, aunque no hay ninguna decisión tomada al respecto. Pero es sin duda un tema muy importante en el sistema jurídico, que puede marcar un antes y después a la hora de buscar nuevas pruebas en contra de un sospechoso. Sea quien sea esta persona, esté en la situación que esté, un sospechoso tiene derecho a la intimidad y este borrador, técnicamente, podría ser anticonstitucional según lo recogido en el artículo 18 de la Constitución española.
Es evidente que para poder hacer esta instalación de un troyano primero se tiene que identificar que el equipo esté dentro de España, y una posibilidad en cambio podría ser ir directamente a requisar el equipo del sospechoso.
Sería papel de un juez quien tenga que autorizar el uso de este troyano que debería desarrollarse y que además se exisigrá que el delito tenga una gravedad mayor que prevista para una intervención telefónica, como se ha venido haciendo hasta ahora.
Cifrado de datos
Se podría pensar que teniendo sistemas que cifran datos, incluso las aplicaciones de mensajería que directamente se cifran antes de enviarse mediante internet, haga innecesario este tipo de aplicaciones judiciales. Pero ese es el caso, que al cifrarse, ese mensaje queda codificado hasta que llegue al destinatario.
Lo que este borrador intenta es interceptar mensajes o cualquier dato directamente desde el dispositivo, como por ejemplo con un keylogger, que podría almacenar todos los mensajes que envíe con el teclado.
Link: La policía podrá usar troyanos para investigar ordenadores y tabletas (El País)