Google presentó una petición a la Justicia de Estados Unidos para que 19 cartas enviadas por el FBI solicitando información de sus usuarios fueran descartadas o ajustadas, para limitar el acceso de las autoridades a los datos. Sin embargo, la Corte rechazó la solicitud, lo que significa que la empresa debe acatar las National Security Letters (NLS), que son enviadas por el FBI para pedir datos sin necesidad de una órden judicial, y que en la mayor parte de los casos, incluyen una prohibición a la compañía de informar que recibió una de estas cartas.
La jueza del caso, Susan Illston, dio una esperanza sin embargo al indicarle a Google que envíe una petición con argumentos más específicos respecto a las cartas concretas que recibió, en lugar de presentar argumentos generales. Illston determinó en un caso anterior que las NSL, tal como están escritas hoy en día, son inconstitucionales. Sin embargo, como ese juicio todavía está en apelación, los documentos del caso de Google todavía son válidos.
Google comenzó a protestar respecto a las NSL este año, publicando estadísticas respecto a la cantidad de cartas que había recibido, aunque no números específicos ni el tipo de información que se le está solicitando. Las NSL existen desde la década de 1980, pero desde los ataques del 11 de septiembre de 2001 su uso por parte del FBI se ha incrementado. Entre 2003 y 2006, la agencia emitió 192.499 cartas de este tipo, y varios grupos temen que se está abusando de esta herramienta violando la privacidad de las personas.
Link: Google must obey FBI’s warrantless requests for user data for now, judge rules (The Verge)