El debate sobre los costos de implementar un complejo sistema basado en software libre a escala corporativa parece haber llegado a un punto de inflexión luego de que en la Libre Software World Conference 2012 celebrada en Santiago de Compostela, España, el especialista italiano Carlo Daffara asegurara que “la economía europea se ahorra 450 mil millones de euros gracias a que reutiliza el código fuente de las aplicaciones que se dan de baja para crear nuevas”, algo que sería imposible de implementar con plataformas licenciadas.
Esta eterna lucha tuvo durante mucho tiempo como argumento, por el lado del software libre, el costo cero de licenciamiento y por parte de los productos cerrados, la complejidad y precio de implementar una solución abierta, que requiere técnicos especializados y muchas horas hombre de trabajo, contra un paquete cerrado con instalación guiada y soporte permanente.
El argumento del italiano Daffara, que además de ser asesor en software libre para la Unión Europea, también trabaja con el CENATIC (Centro Nacional de Referencia para el Software Libre en España), destacó que el crecimiento de este tipo de software en la administración pública ha logrado no sólo el crecimiento de las tecnologías libres sino también un alto nivel de experiencia en metodologías para la reutilización de código en los proyectos tecnológicos públicos.
“El 35% del código de cualquier aplicación informática, independientemente de la licencia que lleve el producto final, ya es software libre reutilizado”, afirmó Daffara.
También destacó el caso español, donde existen muchas empresas de desarrollo locales, que podrían generar un ahorro aún más significativo, teniendo en cuenta que por cada euro gastado en software privativo en Europa, “el 86% de dicho euro se marcha afuera”, según sus palabras.
En la charla se destacó el caso de Brasil, el cual fue presentado por Júlio Cezar Neves, asesor del presidente del Servicio Federal de Procesamiento de Datos del Gobierno de Brasil, quien señaló que un eslabón muy importante son las comunidades asociadas a los proyectos de la Administración que son liberados.
Neves afirma que “aunque se trate de proyectos públicos, es imprescindible apoyarlos en Comunidades de Desarrolladores ya existentes o creadas para esas aplicaciones, ya que esos usuarios introducen más innovaciones que las propias empresas, y una comunidad de software libre, por su forma de funcionar, es la mejor manera de aprovechar esas innovaciones, mejorando y evolucionando el código, generando además riqueza en las empresas de ámbito local, que conocen el código y lo pueden aprovechar para sus productos, o para dar servicios en torno a esas aplicaciones liberadas”.
Calidad, eficiencia presupuestaria, alto nivel de tolerancia a fallas, son algunas de los adjetivos con los que se destacó el rol del software libre en las dependencias públicas europeas, donde los paquetes licenciados parecen haber perdido la batalla por el momento.
Link: El software libre ahorra a la economía europea 450 mil millones de euros al año (baquia)