Fotografías: Mariano Mancilla.
Ya hemos hablado antes de los ultrabooks de segunda generación; aquellos que dejan de lado la filosofía de “lanzar toda al carne a la parrilla” y en cambio, hacen algunas concesiones en términos de hardware y diseño para alcanzar un precio de venta más reducido que los USD$1.000 con que estos productos salieron a la venta en primera instancia, lo que en países de habla hispana se tradujo a más de USD$1.600.
Ahora estamos frente a la apuesta de Sony para esta categoría, el que siendo el primer ultrabook que fabrican, se adapta de inmediato al modelo de reducción de costos, aunque sin escatimar en términos de diseño externo, entregando una estructura firme junto a plataforma interna Intel Core de tercera y última generación, aunque sin una unidad de estado sólido (SSD) de gran capacidad, apoyando el almacenamiento masivo en un disco duro híbrido con un pequeño trozo de SSD.
¿Cuáles serán las ventajas y desventajas de este ultrabook? ¿Cómo se posiciona frente a la competencia? Lo veremos a continuación.
Especificaciones
- Modelo: Sony VAIO T13 SVT13115FL.
- Disponibilidad y precio: Latinoamérica, CLP$600.000 (Chile) –USD$1.150 aproximados–.
- Procesador central (CPU): Intel Core i5-3317U doble núcleo, corriendo a 1,7GHz base escalables a 2,6GHz cuando es exigido. Capaz de procesar cuatro hilos simultáneos (HyperThreading). 3MB de cache, TDP de 17W, parte de la tercera –y última– generación de procesadores Intel Core Ivy Bridge, hecho bajo un proceso de 22nm.
- Gráficos (GPU): Integrados Intel HD 4000. Corren a 350MHz base escalables a 1.050MHz bajo carga.
- Memoria RAM: 4GB DDR3 a 1333MHz, expandibles hasta 8GB.
- Almacenamiento: Disco duro de 320GB girando a 5400rpm, más una pequeña unidad de estado sólido (SSD) de 32GB para el almacenamiento caché de datos utilizados frecuentemente.
- Pantalla: 13.3 pulgadas, retroiluminación LED, resolución de 1366 x 768 pixeles.
- Conectividad: Ranura para tarjetas de memoria y Memory Stick Duo 4, USB 3.0, USB 2.0, puertos HDMI y mini D-sub. Ethernet, Bluetooth.
- Batería: Promete hasta siete horas de autonomía.
- Dimensiones y peso: 1.7cm de grosor, 32cm de ancho y 22.6cm de fondo. 1.6 kg de peso.
- Otros: Cámara web de 1.3Mpx.
- Software: Remote Keyboard, Remote Play con PlayStation 3, VAIO Gate, Adobe Reader, Control de Gestos, Magic-i Visual Effects, Media Gallery, Media Go, PlayMemories Home, Webcam Companion, Office 2010 (versión de pruebas), suscripción de 30 días a Kaspersky Internet Security 2012.
Diseño y pantalla
Como ya dijimos, este Sony VAIO es un ultrabook que pese a ser de segunda generación, va un poco en contra de la corriente al insistir en un diseño externo de buena calidad, gracias al uso de materiales resistentes y atractivos visualmente. Y es que la cubierta inferior es una sola pieza que se extiende hacia los costados del equipo, a lo que se suma una segunda estructura superior que en conjunto, empaquetan todo el notebook, incluyendo teclado y trackpad, los que no necesitan sentarse sobre otra cubierta. Así, al formar todo parte del mismo cuerpo, se otorga una gran sensación de resistencia y firmeza, siendo casi imposible doblar o hacer crujir el equipo, incluso cuando lo sostenemos sólo desde las puntas o extremos.
En términos de delgadez, la plataforma ultrabook otorga la posibilidad de alcanzar convenientes 1.7cm de grosor, los que de todas formas están en el promedio de esta clase de equipo, por lo que no hay nada para sorprenderse en dicho sentido, al igual que con el peso: 1.6Kg que ya se han repetido en ofertas de otras compañías.
Sí, es agradable el aspecto externo, y aunque sabemos que se trata de algo subjetivo, no dejan de llamar la atención ciertos detalles que le dan un sello distintivo a este equipo, con ángulos definidos y un aspecto general que evoca una línea de diseño propia de la serie Sony VAIO, en un empaque sobrio pero elegante, con bordes adornados y una superficie trasera de la pantalla hecha de aluminio pulido.
Acerca de la pantalla, la resolución de 1366 x 768 pixeles se ha convertido en un estándar de la industria, y al momento de evaluar brillo y contraste, vemos que si bien no nos quedamos cortos en términos de brillo, sí hay cierta pérdida de colores, con una tendencia hacia los blancos que afecta el contraste y la definición de tonalidades básicas.
Vemos también que al moverse en línea vertical, la distorsión de color es grande y se pueden alcanzar cortos ángulos de visibilidad. En cambio, moviéndonos en línea horizontal (hacia los lados) la pérdida es baja y alcanzamos a ver bien desde diversas posiciones: ideal para cuando se está mirando imágenes o videos con un acompañante.
Teclado y trackpad
A primera vista, teclado y trackpad se ven atractivos visualmente gracias a su simplicidad, sin embargo, la experiencia de uso deja con gusto a poco. Y es que el teclado, pese a ser muy firme y con teclas suficientemente espaciadas entre ellas, tiene muy poca altura y distancia de recorrido cuando uno presiona algún botón, lo que resulta algo incómodo desde un primer momento y toma tiempo para acostumbrarse. En otras palabras, las teclas están demasiado hundidas y a veces da la impresión de estar tocando una superficie táctil, perdiéndose naturalidad al momento de escribir.
Nos pesa también la ausencia de retroiluminación, elemento clave para algunos usuarios y cuya funcionalidad está de más repetir, pero entendemos su ausencia dado que este equipo intenta entregar un diseño robusto por un precio no tan excesivo como los ultrabooks de primera generación, algo que hasta el momento han logrado, pero teniendo que sacrificar elementos como la luz en las teclas.
El trackpad tampoco es de lo mejor: el espacio para manejarse es pequeño en comparación a otras soluciones, y se pudo haber destinado mayor superficie para aquello, ya que se pueden ver amplios bordes alrededor del pequeño rectángulo para gestionar los gestos multitáctiles que soporta, los que ya son un estándar en la gran mayoría de los equipos: desplazamiento con dos dedos, pinch to zoom, etc.
No se ve mucha dedicación por parte de Sony en la elección de material para el trackpad: parece ser el mismo plástico utilizado en el resto de la carcasa interior, de la misma textura y sensación, que si bien es suave, no parece estar hecha para esa función, que es desplazar los dedos sobre ella de manera regular y constante. Se torna algo incómodo para personas de manos húmedas, y para el resto también causa problemas al no tener demasiada precisión en las instrucciones, lo que a largo plazo, nos invita a comprar un mouse externo para gestionar dicha función.
Experiencia de uso y software
Un error común que comete Sony en su línea de portátiles VAIO es incluir demasiado software pre-instalado desde fábrica, el cual muchas veces no utilizaremos pero hace más lento el funcionamiento de nuestro equipo, al añadir gran cantidad de procesos en la carga del sistema operativo, penalizando el rendimiento general.
Es por esto que a pesar de la inclusión de una memoria caché, basada en una no tan pequeña unidad de estado sólido (SSD) de 32GB, el portátil no logra arrancar en tiempos que estén en el promedio del resto de ultrabooks, que anotan 20 o 30 segundos. Este VAIO prende en 1 minuto, apagándose en 22 segundos. Y eso que intentamos des instalar algunas cosas y limpiar parcialmente el registro de Windows, pero aún así, no hubo caso.
Lo bueno es que se calienta poco, e incluso bajo circunstancias extremas de exigencia, el sistema de refrigeración responde bien, expulsando aire desde el costado izquierdo y también a través de ranuras en la base del equipo, lo que sí puede llegar a ser molesto si es que se utiliza apoyado sobre las piernas.
Rendimiento
Otro ultrabook más a nuestra lista, con este VAIO compartiendo plataforma interna sólo con el Lenovo U310, otro portátil de segunda generación. Antes que este par, salieron al mercado a precios mucho mayores los modelos Lenovo U300s, HP Folio 13, Toshiba Portege Z835 y Samsung 530U (Serie 5 Ultra), mientras que por otro lado también se estrenaron los “casi” ultrabooks HP ENVY 14 Spectre y Acer Aspire Timeline Ultra M3-581TG, que muestran tamaños de pantalla superiores a las 13 pulgadas.
Acá no tenemos que esperar nada sorprendente: el salto en rendimiento que entrega el procesador Intel Core i5-3317U doble núcleo, el que llega a los 2,6GHz cuando está bajo carga, pese a ser de tercera y última generación no cambia en demasía la experiencia de uso diario, mientras que los gráficos Intel HD 4000 sirven poco para aplicaciones 3D intensivas.
Veremos primero el benchmark o conjunto de pruebas sintéticas que realiza Windows 7 con su herramienta integrada desde fábrica, la que entrega como máximo un puntaje de 7,9 por cada componente principal del sistema, siendo la cifra principal dada por el número más bajo obtenido:
En general se nota una plataforma bastante equilibrada, pero de la mitad hacia abajo. Recordemos que estamos frente a un procesador de bajo voltaje, y por ende, discreto rendimiento, mientras que el disco duro giratorio y los gráficos Intel HD 4000, tampoco ayudan a subir las cifras.
De todas formas, estamos frente a una máquina pensada no para exprimirla, sino para rendir en tareas cotidianas y mantener una duración de la batería decente, siendo la premisa inicial a la hora de que los fabricantes armen ultrabooks. Claro, a veces Intel dice que HD 4000 sirve para aplicaciones 3D intensivas, o se promete almacenamiento súper veloz con un SSD de apenas 32GB para cache más disco duro, sin embargo, los grandes beneficios en el papel no se traducen en la práctica. Y no es que lo necesitemos tanto tampoco, porque si queremos un portátil para algo específico que no sean labores de ofimática y navegar por Internet, definitivamente no debiéramos estar mirando un ultrabook.
Hay una cosa que sí podemos exigirle a estos equipos: equilibrio. Sabemos que no son buenos para una u otra cosa, sino que para lo cotidiano y general, así que PCMark 7 será el benchmark ideal para medir el rendimiento de la plataforma trabajando al unísono, mostrándonos un balance resultado de la reproducción y codificación de video de alta calidad, navegación por Internet y la capacidad de procesamiento durante la edición de imágenes:
Futuremark PCMark7 | Reproducción y codificación video (Frames por segundo) | Procesamiento de páginas web (Páginas por segundo) | Manipulación de imágenes (Mpx por segundo) | General |
Lenovo U300s | 23.1 | 8.19 | 6.39 | 3117 |
Sony VAIO Serie E14P | 23.04 | 12.44 | 9.14 | 2287 |
Lenovo U310 | 23.04 | 10.3 | 8.24 | 3451 |
HP Pavilion m6-1076la | 22.97 | 10.88 | 11.47 | 2005 |
HP Folio 13 | 23.1 | 8.32 | 6.5 | 3170 |
Samsung Series 7 Gamer | 23.04 | 14.99 | 9.51 | 3456 |
Sony VAIO Serie T13 |
22.97 | 10.21 | 8.51 | 2376 |
Vemos cifras muy acordes al Lenovo U310, y era que no, si ambos equipos son casi iguales en sus componentes internos. El puntaje general cae dramáticamente si comparamos a un equipo que tiene unidad de estado sólido (SSD) por completo, como el HP Folio 13 o Lenovo U300s, que si bien en un inicio salieron por un precio de venta más alto que este Sony VAIO, en la actualidad se encuentran casi exactamente al mismo valor.
Pasemos ahora a revisar cómo anda el procesador central por sí solo, a través de la aplicación Cinebench R10, que mide el desempeño en rendereo o post-procesamiento utilizando un único núcleo de la CPU (SingleCPU) así como todos juntos (Multi CPU), exigiendo levemente los gráficos en el apartado OpenGL:
Misma categoría (Ultrabooks):
CineBench R10 |
Single CPU |
Multi CPU |
OpenGL |
Acer Aspire Timeline Ultra M3-581TG | 3352 | 7000 | 4449 |
Toshiba Portégé Z835 |
3611 | 7190 | 4620 |
Samsung 530U (Serie 5 Ultra) | 3513 | 6195 | 3743 |
HP ENVY 14 Spectre | 3622 | 7211 | 4677 |
Lenovo U300s | 3544 | 7137 | 3724 |
Lenovo U310 | 4378 | 9085 | 4049 |
HP Folio 13 | 3626 | 7294 | 4481 |
Sony VAIO Serie T13 |
4391 | 9168 | 4094 |
Otras categorías:
CineBench R10 |
Single CPU |
Multi CPU |
OpenGL |
Alienware M11x | 1643 | 2979 | 2886 |
SONY VAIO 3D VPCF215FL | 4529 | 17121 | 3859 |
Sony VAIO VPCCA17FL | 4621 | 9768 | 4793 |
Sony VAIO Z | 4573 | 9819 | 2058 |
Samsung R480 | 2362 | 5494 | 2924 |
Samsung R580 | 2795 | 6268 | 3350 |
Samsung Series 7 Chronos | 4688 | 14070 | 5607 |
HP Pavilion dm1z | 1149 | 2210 | 1937 |
HP Pavilion dm4 | 3081 | 6852 | 2036 |
HP Pavilion DV6-6185LA | 4582 | 16983 | 5490 |
Sony VAIO Serie E14P | 4910 | 10376 | 6980 |
Samsung Series 7 Gamer | 4810 | 18051 | 8643 |
No casualmente, el Lenovo U310 y este Sony VAIO Serie T13 tienen un mejor rendimiento en la CPU, con números bastante estables que denotan una importante mejora en términos de procesamiento central. Pero hace algunas líneas atrás dijimos que el rendimiento de esta generación de procesadores centrales Intel era discreto por el bajo voltaje, adjetivo que también aplicamos a toda la plataforma en general.
¿Nos estamos contradiciendo? Tranquilidad, porque si bien vemos una mejora en la segunda generación de ultrabooks respecto a la primera, el salto en puntajes generales es nulo o inexistente. Además, en labores multitarea los notebooks regulares (en la segunda tabla) le sacan gran ventaja a este pobre Intel Core i5 de 17W. Y el procesamiento gráfico para tareas 3D, como juegos, es harina de otro costal…
La prueba 3DMark nos dirá cómo rinden los gráficos Intel HD 4000:
Misma categoría (Ultrabooks):
Futuremark 3DMark 2006 |
SM 2.0 |
SM 3.0 |
CPU |
TOTAL |
Acer Aspire Timeline Ultra M3-581TG | 4800 | 5267 | 2440 | 10854 |
Toshiba Portégé Z835 | 1422 | 1690 | 2440 | 4114 |
Samsung 530U | 1170 | 1461 | 1931 | 3454 |
HP ENVY 14 Spectre | 1187 | 1468 | 2000 | 3498 |
Lenovo U300s | 1186 | 1408 | 2412 | 3484 |
Lenovo U310 | 1196 | 1634 | 2958 | 3838 |
HP Folio 13 | 1195 | 1414 | 2023 | 3444 |
Sony VAIO Serie T13 | 1780 | 2345 | 2959 | 5403 |
Otras categorías:
Futuremark 3DMark 2006 |
SM 2.0 |
SM 3.0 |
CPU |
TOTAL |
SONY VAIO 3D VPCF215FL | 2462 | 3063 | 3231 | 7060 |
Sony VAIO VPCCA17FL | 2473 | 3074 | 3129 | 7054 |
Sony VAIO Z | 1598 | 1975 | 3199 | 4761 |
Samsung R480 | 3183 | 3167 | 2216 | 7547 |
Samsung R580 | 3178 | 3273 | 2498 | 7726 |
Samsung Series 7 Chronos | 2978 | 3266 | 3454 | 7946 |
HP Pavilion dm4 | 655 | 856 | 2763 | 2120 |
HP Pavilion DV6-6185LA | 4063 | 5341 | 5048 | 11877 |
Sony VAIO Serie E14P | 2030 | 2512 | 3405 | 5976 |
HP Pavilion m6-1076la | 2851 | 3418 | 2815 | 7692 |
Samsung Series 7 Gamer | 7559 | 8195 | 5451 | 18461 |
En esta ocasión el VAIO se nos arrancó, mejorando los puntajes en relación a sus hermanos en lo que a gráficos respecta, seguramente por que los drivers de video de Intel están más actualizados que en ocasiones anteriores. Pero una vez más se aplica lo mismo: tenemos un alza, cierto, pero sólo son cifras dentro de una tabla, y pese al optimismo que éstas generan, no son lo suficientemente altas como para hacen andar bien juegos 3D exigentes. Prueba de aquello es la comparación con el Acer Aspire Timeline Ultra M3-581TG, portátil con GPU NVIDIA que duplica en 3DMark 06 a este VAIO, lo que realmente se aprecia a la hora de lanzar una aplicación 3D.
Finalizamos con el rendimiento del disco duro de 320GB en este ultrabook, algo que nos reflejará la prueba CrystalDiskMark 3:
El promedio de un disco duro para notebook, ni más ni menos, con lecturas a 73MB/seg y escritura a lo mismo. Girando a 5400rpm, tampoco es mucho lo que podemos esperar, por lo que Sony, al igual que el resto de los fabricantes de ultrabooks de segunda generación, decidió la entrada de unidades de almacenamiento híbridas, aquellas que integran un disco duro tradicional junto a una pequeña porción de unidad de estado sólido (SSD) para el caché de datos utilizados frecuentemente, como el sistema operativo, lo que debiera acelerar su carga.
Sin embargo, algo sucede con estas soluciones que no funcionan del todo bien: se promete velocidad de SSD y en ningún caso se alcanza, y no lo decimos por CrystalDiskMark 3, que probó sólo el disco duro, sino por los tiempos de arranque, que en todos los portátiles con almacenamiento híbrido que hemos probado ronda el minuto, mientras que en equipos 100% SSD no pasamos de los 20 segundos. Hay trabajo pendiente ahí.
Juegos
La prueba 3DMark 06 que vimos anteriormente nos reveló una pequeña alza de rendimiento en los gráficos Intel HD 4000 respecto a otros gráficos integrados Intel, algo que seguramente llegó gracias a drivers (controladores) optimizados. Veremos entonces en la vida real si es que dichos cambios se aplican en la práctica.
Lo primero será correr un título popular, como Starcraft II en sus cinco configuraciones estándar para la calidad de los gráficos: Bajo, Intermedio, Alto, Ultra y Extremo. Medimos los FPS (frames o cuadros por segundo) que conseguimos en promedio y en sus puntos más altos y más bajos, es decir, cuando la exigencia del juego es menor y hay pocos elementos en pantalla, así como también cuando ésta es mayor. Esto se produce durante una batalla épica donde se obtiene el número de FPS más bajo, considerando que 30 FPS es una cifra que permite un juego fluido, no menos que eso:
Bajo | Intermedio | Alto | Ultra | Extremo | |
FPS Promedio | 78 | 33 | 25 | 16 | 16 |
FPS Mínimo | 15 | 13 | 10 | 8 | 8 |
FPS Máximo | 149 | 62 | 44 | 29 | 28 |
En la configuración más baja, el juego se ejecuta bien para usuarios casuales: los tirones de 15 frames por segundo no serán del agrado de quienes tengan experiencia en Starcraft II, sin embargo, esto sucede sólo en casos donde hay demasiadas unidades en pantalla, manteniéndose un promedio muy bueno durante casi toda la experiencia.
Far Cry 2 es otro juego 3D que no es el título más exigente del mercado, y no supone un dolor de cabeza casi para ninguna configuración de hardware moderna. Correremos su herramienta de benchmark a resolución de 1280×720, sobre DirectX 10 con filtro Anti-Aliasing(4x) y calidad general óptima:
FPS Promedio | FPS Máximo | FPS Mínimo | |
Lenovo U310 | 11 | 17 | 8 |
HP Pavilion m6-1076la | 32 | 51 | 23 |
HP Folio 13 | 11 | 16 | 7 |
Samsung Series 7 Gamer | 100 | 142 | 75 |
Sony VAIO Serie T13 | 16 | 26 | 11 |
Otra vez se refleja la pequeña mejora respecto al resto de los ultrabooks, sin embargo, no alcanza para jugar Far Cry 2 de manera decente, porque 16fps promedio en pantalla se ven muy, pero muy mal.
Claro, las cifras son optimistas cuando tenemos alzas de un 30% en los gráficos Intel HD 4000 por sobre los HD 3000, sin embargo, al parecer la generación pasada era tan paupérrima que en la práctica, aún no se alcanza un nivel de jugabilidad estable y que permita correr títulos que tampoco son tan exigentes, pues Starcraft II y Far Cry 2 están por debajo de la media de exigencia en la industria.
Batería y cargador
Uno de los aspectos importantes a considerar en un ultrabook es la duración de la batería. Porque junto con la delgadez, estos equipos prometen además gran autonomía energética, en una máquina portable para llevar al exterior sin depender de una toma de corriente, y en esto, en general la categoría de productos se comporta bien.
Para probar aquello, le dimos inicio a nuestra “Prueba de YouTube”, donde echamos a andar sobre Google Chrome un video en YouTube, el más largo que pudimos encontrar, a 240p en el reproductor pequeño, usando el perfil de energía de Windows en “Equilibrado” y el brillo de la pantalla a 3/4 de su capacidad máxima. Comparemos contra algunos ultrabooks:
Test de YouTube |
Tiempo |
Lenovo U300s | 4:45 |
Lenovo U310 | 3:56 |
HP Folio 13 | 5:10 |
Sony VAIO Serie T13 | 4:38 |
Tiempo de trabajo que se suma a la media de los equipos, lo que debería alcanzar para una media jornada de trabajo intensa sin depender del cargador, el que dicho sea de paso, no es tan pequeño como otros extremadamente reducido que hemos visto, sin embargo, mantiene dimensiones discretas que no lo hacen molesto para llevarlo en el día a día.
Conclusión
Nos encontramos con un equipo que de entrada tiene un precio más discreto que la primera camada de ultrabooks que vimos en el mercado, en una segunda generación que hace concesiones en diseño y almacenamiento interno para reducir su costo. Pero en este VAIO serie T13 eso casi no se nota: la construcción es impecable, elegante y muy firme, con gran elección de materiales.
En rendimiento nos quedamos un poco cortos; y es que la plataforma Intel para ultrabooks tampoco da para más, con un claro enfoque hacia mantener la vida de la batería en lugar de ofrecer rendimiento, por ejemplo, gráfico, donde el chip Intel integrado se cae, como siempre. No es una buena decisión comprar un ultrabook para juegos 3D, claro está, y a esto debemos sumar que la solución de almacenamiento híbrido no anda bien y los tiempos de arranque son lentos, donde el exceso de software pre-instalado de fábrica también penaliza en este ámbito.
Pese a aquello, casi toda la promesa de los ultrabooks se cumple en este producto, y al no tener un valor exagerado como otros modelos vistos hace un par de meses atrás, se levanta como una de las mejores alternativas para esta categoría, en este rango de precios.
Lo Imperdible
- Diseño atractivo.
- Firmeza en la construcción y buena elección de materiales.
- Buenas prestaciones generales por un precio de entrada más bajo que el resto.
Lo Impresentable
- Teclado y trackpad débiles.
- Exceso de software pre-instalado de fábrica.
- Almacenamiento interno que no responde velozmente.
- No hay teclado retroiluminado.