Al parecer los teléfonos Optimus 7 con Windows de LG están fallando y el problema no es el software, sino el hardware. El asunto es que a pesar de existir una garantía, el defecto del teléfono por alguna razón cósmica, es irreparable, lo que significa que a LG no le queda otra salida más que cambiarle al cliente el equipo por uno nuevo.
Como ya pudieron adivinar, a los desafortunados que compraron un Optimus 7, LG les está dando un teléfono nuevo con Android y es que, para la mal suerte de la compañía, no hay Optimus 7 en existencia, literal, no hay ni uno en demostración que puedan usar.
Afortunadamente LG está respondiendo ante las quejas de los clientes y no como otros, que dicen que las fracturas en la carcasa de su teléfono no vienen incluidas en la garantía. Imagino que para algunos clientes el cambio no debe ser tan radical, después de todo Android es un gran sistema operativo, pero por otro lado, quienes buscaban exclusivamente la experiencia de Windows, debe ser bastante frustrante tener que lidiar con Android.
¿Ustedes que haría, aceptarían el nuevo equipo o esperarían hasta que les repusieran su teléfono por uno idéntico al que compraron?
Link: LG replaces faulty Optimus 7 units with Android smartphones (Phone Arena)