Esta semana, gran cantidad de usuarios de routers Linksys de Cisco se encontraron con un mensaje de que el aparato, normalmente encargado gestionar las comunicaciones con la red, se había suscrito (por sí solo) a un servicio que traspasaba gran cantidad de funciones a la nube, e incluía unos términos de servicio que prohibían el ver porno y sugerían que Cisco vigilaría la navegación del usuario.
Ante tales indicaciones, lógicamente, las personas se quejaron airadamente contra la compañía. Los routers afectados son los Linksys EA3500, EA2700 y EA4500, que se suscribieron automáticamente a un servicio lanzado por Cisco en abril llamado “Connect Cloud”. Este servicio tiene varias características, como control parental, funciones de streaming, y otros. También señalaba que “podríamos registrar cierta información relacionada a la manera en que usas el servicio”.
Después de las quejas, Cisco ha tratado de calmar los ánimos, sin mucho éxito. La compañía aseguró que las personas no están obligadas a suscribirse a Cloud Connect y que pueden desactivar la opción de actualizaciones automáticas en sus routers. También simplificaron la manera en que uno se puede salir del servicio.
“Creemos que la falta de claridad de nuestros términos de servicio ha contribuido a muchas de las preocupaciones de los usuarios”, afirmó la compañía, agregando que “los routers Linksys no rastrean ni almacenan información personal del uso de internet de los clientes”.
Sin embargo, esto no elimina el hecho de que la empresa trató de forzar el uso de un servicio en la nube a los dueños de routers. Lo que pasó con Cisco es una muestra de algo que a varios les preocupa: ¿cuánto control podemos tener sobre nuestros propios equipos?
Links:
– Cisco routers updated with anti-porn, anti-piracy user agreement (MSN)
– UPDATE: Answering Our Customers’ Questions about Cisco Connect Cloud (Cisco)