Mucho se decía — y se esperaba — acerca de la primera presentación de productos con Tim Cook como director ejecutivo de Apple. Se decía que sería su oportunidad de brillar y dejar atrás la sombra de Steve Jobs.
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Más allá de los productos — el iPhone 4S, el iPod Touch blanco o los iPod Nano-relojes — faltaba un análisis del desempeño de quienes los presentaron. Particularmente del hombre a cargo de la fábrica de manzanas.
En primer lugar, la ropa. Jobs usaba una tenida — una especie de “uniforme” — que se volvió una clásico en el mundo de la tecnología: beatle (camiseta negra de manga larga con cuello) y blue jeans (pantalones vaqueros). Cook vistió una camisa negra y vaqueros negros.
Revisemos lo que dijeron algunos periodistas tech.
“Me recuerda a Jobs, pero sin beatle. Estiloso. Me gusta este tipo”, escribió Mat Honan, del sitio Gizmodo.
Luego, la manera de hablar. Steve Jobs era conocido por ser un gran orador, carismático, con desplante.
Lance Ulanoff, de Mashable, comentó sobre la voz de Cook: “Tiene una cadencia interesante. Es hipnotizador”.
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Pero Leander Kahney, de Cult of Mac, afirmó que no tiene nada que ver con “el entusiasmo contagiante” de Jobs, que hacía que sus presentaciones fueran electrizantes. Y agregó: “Cook habla despacio y suave. Es como un caballero cortés del sur. Puede ser un poco soporífero”.
Por último, Cook no usó la famosa frase de Jobs “one more thing” (una cosa más) al final de los anuncios.
¿Cómo creen que lo hizo Tim en su primera keynote como CEO de Apple? ¿Bien o mal? ¿Peor o mejor que Stevo?
