Vista de Plaza Houssay desde el edificio de la Facultad de Ciencias Económicas
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Hace unos días atrás se anunció la instalación de Wi-Fi público en una de las plazas más transitadas de la Ciudad de Buenos Aires, pero hasta ahora, ciertos temas no menores han impedido que los usuarios puedan utilizarlo de la mejor forma.
Plaza Houssay está ubicada en el límite entre el coqueto barrio de Recoleta y Balvanera (Ciudad de Buenos Aires) y se encuentra rodeada por los edificios de las facultades de Medicina, de Ciencias Económicas y del Hospital De Clínicas. Desde hace muchos años atrás se convirtió en un espacio adoptado por personas en situación de calle debido a su arquitectura, donde predominan los desniveles y el cemento. Incluso, esta situación de marginalidad fue aprovechada por muchos programas sensacionalistas de televisión para ocupar horas de aire mostrando actos de delincuencia y vandalismo tomados por algunas cámaras de seguridad de la periferia.
Algunos arquitectos la consideran “la plaza de la depresión” ya que no cumple con la consigna de espacio verde en una zona donde escasean. Fue inaugurada en 1980 durante el gobierno de facto del Brigadier Osvaldo Cacciatore y posee un diseño similar a muchas de las obras realizadas durante la dictadura militar de 1976/1983.
Desde hace un año aproximadamente se comenzó a limpiar, desalojar a las personas que vivían en forma precaria dentro de la plaza y a colocar cámaras de seguridad para controlar el alto nivel de delincuencia que generaba el flujo constante de personas, en general, estudiantes de las facultades linderas.
Pero al parecer, los vecinos siguen desconfiando de Plaza Houssay, ya que desde el anuncio hace unos diez días de la instalación de Wi-Fi gratuito y la mejora en la seguridad y vigilancia del espacio público, los usuarios no han utilizado el servicio por miedo a que les roben sus equipos. ¿Hasta donde la tecnología puede mejorar la calidad de vida si otras necesidades no están cubiertas? ¿Sirve modernizar un espacio público donde todavía no se resuelven temas como la inseguridad y la falta de políticas para garantizarles un techo a quienes no lo tienen?
La inauguración del servicio estuvo a cargo del ministro de Ambiente y Espacio Público de la ciudad, Diego Santilli, quien primero realizó el anuncio a través de su cuenta de Twitter. También informó que este es el primero de los 26 espacios públicos porteños que ofrecerán este servicio, y que se estima que se habilitarán nueve plazas más durante 2011 a razón de una por mes.
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La instalación del hardware y el cableado estuvo a cargo de la empresa española Gowex a través de un convenio con el Gobierno de la Ciudad y el servicio de internet de 3 a 6 mb sin clave es brindado por Cablevisión.
Las próximas plazas donde el gobierno de la Ciudad tiene planificado instalar el servicio de Wi-Fi libre durante 2011 son Dorrego (Humberto 1° y Defensa); Cortázar (Honduras y Serrano); Angel Gris (avenida Avellaneda y Donato Alvarez); Arenales (Chivilcoy y Pareja); Libertad (Paraguay y Libertad); parque Santojanni (Patrón y Martiniano Leguizamón); plaza Constitución; plaza Mariano Moreno (avenida Rivadavia y Montevideo) y plaza Rodríguez Peña (avenida Callao y Paraguay).
Link: La plaza Houssay, la primera con Wi-Fi (LaNación)
