Una de las principales preocupaciones a la hora de construir una central nuclear (aparte de todas las consideraciones ecológicas involucradas), se relaciona con el lugar físico en donde va a ser instalada.
Lo anterior no es menor en aquellas ciudades o países densamente poblados (Japón podría ser un claro ejemplo), ya que por lo general a nadie le gusta que le instalen una central de estas características en el entorno donde vive.
Con esto en mente los astilleros navales franceses presentaron un proyecto para la construcción de un reactor nuclear submarino, con la finalidad de que sea utilizado en la generación de electricidad para una ciudad costera (o una isla) y cuya potencia sería de hasta 300 megavatios.
Se espera que a más tardar el año 2013 se tome la decisión sobre la construcción de un prototipo de este reactor (al que han denominado como FlexBlue), para lo cual ya se ha conformado un grupo de ingenieros para que trabajen en su diseño.
Los ingenieros navales franceses tienen mucha experiencia en la construcción de reactores nucleares, los que en la actualidad son utilizados en submarinos y portaaviones pertenecientes a la marina de ese país.
El diseño preliminar de la central nuclear corresponde a un cilindro de entre 12 a 15 metros de diámetro con una caldera en si interior, esta estructura estaría unida a una central eléctrica.
La idea es que la construcción de la central se localice a unos 100 metros de profundidad y a varios kilómetros de la costa, de manera de garantizar que no se encuentre expuesta a los peligros típicos de las centrales nucleares construidas en la actualidad.
Al estar sumergida en el mar la central no necesitaría contar con un sistema de enfriamiento adicional, lo que facilita su construcción y reduce considerablemente los costos de operación (se obtendría energía a un menor costo).
Link: Deep sea fission (World Nuclear News)