También comparó a las compañías con quienes fabrican malware, debido a que una segunda instalación escondida ocurrió sin la autorización del usuario.
«Puede que estas piezas adicionales de software instaladas sin mi consentimiento no sean maliciosas, pero la forma en que fueron instaladas fue furtiva, poco limpia e incorrecta», sentenció Dotzler.
Llamó a todas las compañías a «no ser malignas», incluyendo a nuevos competidores como RockMelt a que «no sigan el camino maligno».
No es difícil pensar en software que hace esto, no sólo con el navegador. Además de «aparecer de la nada», son programas que consumen recursos, y que a veces ni siquiera es fácil deshabilitar o remover. Esta no es la primera vez que se hace notar esta situación, ni la primera vez que Dotzler llama la atención sobre la pérdida de privacidad de los usuarios.
Link: Firefox and more: why do they think this is OK? (Blog de Asa Dotzler vía The Register)