Por fin llegó al PC el juego que muchos han catalogado como un título digno de comparar con Zelda. Y no es para menos, Darksiders llega a esta plataforma demostrando, como juego de aventuras, acción y exploración, que puede brillar por sí solo. Nada de búsquedas de la verdad, luchas por la justicia, o rescates a princesas: aquí va a correr sangre de verdad y de la forma más brutal que puedas imaginar.
Parece que llegamos en mal momento
Darksiders es básicamente un juego que sigue la mecánica establecida por Zelda hace años atrás: Exploración + Items + Calabozos + Jefe final, pero con más sangre. En otras palabras, estarás desenvolviéndote en un mundo desde un punto “A” hasta un punto “B” – repasando ciertas zonas – a medida que logres obtener los elementos necesarios para seguir avanzando. También tendrás la opción de volver atrás si se te olvidó algo, o bien, por una mejora que te puede ser útil, pero es un tiempo que puedes gastar de forma opcional. Tienes aseguradas unas 8 horas de juego, y unas 13 si tienes las agallas de conseguir todas las cosas.
La historia trata de la aventura de “War” (Guerra), quien es uno de los cuatro integrantes de los Jinetes del Apocalipsis junto a Hambre, Peste y Muerte, que le sirven a El Consejo para limpiar todo el planeta. Se supone que habría una guerra entre El Reino del Cielo, del Infierno y de los Humanos cuando estos últimos estuviesen a la par, y cuando se rompiesen 7 sellos, signos de tregua entre los dos primeros reinos. Sin embargo la guerra estalla antes porque a alguien se le ocurrió romper todos los sellos. “War” llega en este falso Apocalipsis, porque descubre que no todos los sellos fueron rotos. Es acusado por El Consejo de ayudar al Infierno a ganar la guerra, pero logra convencerlos de volver para descubrir que alguien está detrás de todo.
Hasta ahí todo va bien, pero la historia comienza a debilitarse a medida que avanzas. Esto es gracias a varios nombres raros que tardan bastante de identificar con los personajes, algunos diálogos innecesarios y confusos, y de desarrollo de personajes bastante hermético. “Watcher”, el que acompaña a “War” para que no haga nada fuera de su misión, es uno de los personajes que mejor se desarrolla, pero es muy difícil identificarse con alguno de los otros, especialmente intentar descubrir la sed de venganza en el tono de voz de “War”.
Nuestro protagonista vuelve al planeta después de 100 años, para descubrir que los humanos ya no existen y que para acceder a la torre donde se encuentra la mente detrás de todo esto necesitará conseguir ayuda. Todo está en ruinas, desde las grandes ciudades con autopistas hasta los subterráneos. Si no ha sido todo consumido por el Infierno, el bando que ganó, los lugares han sido afectados por el frío, la sequía o la abundante vegetación, y de eso Darksiders se encarga bastante bien. Las gráficas son eficientes en mostrar cómo ha quedado el mundo, pero no hay ninguna opción para modificar la calidad del juego, así que puede que te encuentres con un gran problema si quieres sacarle todo el jugo a tu tarjeta de video o hacer el juego más fluido.
Un Zelda de cabeza pero sin sangre
A pesar de una historia que podría quedar en segundo plano, los calabozos dentro de Darksiders son lo mejor. Hay varios puzzles que necesitan algo más del ceso promedio para resolver, especialmente aquellos con un tesoro al final como aquellos ítemes para mejorar las características de tus armas. Sin embargo, no siempre el ítem que obtienes en el respectivo calabozo sirve para matar al jefe del calabozo, así que tendrás que cabecearte un rato para averiguar cómo aniquilar esa araña gigante.
Para hacerte paso por Darksiders necesitarás sacar lo mejor de tus habilidades pateando traseros para derramar toda la sangre que puedas. Los controles en el teclado y mouse sin definitivamente prohibitivos, se sugiere un joystick para jugarlo si no quieres ganarte un viaje al quiropráctico. Un control de XBOX 360 puede hacer el trabajo bastante bien, y es bastante recomendado uno parecido si no lo tienes. La mecánica de combate es interesante, parecida a lo que podrías esperar de algún “beat’em up” como God of War u otros de la misma línea, golpear en combos es genial pero se queda corto en varios sentidos: la ejecución de cada enemigo tarda demasiado y le quita ritmo a la pelea entre varios enemigos, y los combos son efectivos pero bastante limitados. Hay varias inconsistencias en ese sentido, como algunos malos ángulos de cámara (a veces, por fortuna) y la complicada forma de cambiar de enemigo en la mira que te puede significar recibir algunos golpes cuando menos los esperas.
No todo es repartir golpes, también hay que defenderse, y quizás esta mecánica es una de las más débiles de Darksiders. Con un botón (RB/R1 por defecto) te cubres de casi cualquier ataque frontal, pero mezclado con alguna dirección puedes patinar hacia hacia donde elijas. Para contraatacar debes cubrirte justo al momento del golpe, algo que es bastante difícil de dominar. Aunque el timing no debe ser demasiado perfecto, los enemigos que no marcan los ataques son básicamente una invitación a gastar tu barra de energía.
Lo más incómodo es que no puedes contraatacar de forma cómoda también al patinar, y esta forma de evitar golpes tiende a ser muy restrictivo en términos de distancia y dirección. Existe gran variedad de enemigos, y la mayoría se puede eliminar a punta de espadazos pero puedes sacarles más ventaja combinando armas y combos. Muchas veces te toparás con enemigos grandes que darán golpes de gran poder y que, con sólo un dominio perfecto de “War”, podrás evadir con eficiencia, algo malo porque tomas mucho tiempo para desarrollar esa habilidad.
Para los exploradores de corazón, no les agradará saber que Darksiders no es un título amigable para viajar entre lugares que ya visitaste para averiguar algún secreto. Existen varios “peros” respecto a la facilidad de desplazamiento, porque nadie quiere estar con el control pegado a una dirección por un buen rato mientras nada aparece, así que esa es una motivación extra para no dejar ningún rincón sin explorar (y tomar nota) porque será un parto volver a un lugar puntual. Por ejemplo: no hay forma de verificar el mapa de una zona de otro lugar, debes estar ahí para hacerlo; el caballo Ruin a veces no se asoma en algunos lugares para acelerar la exploración; y muchas veces extrañarás más portales para hacer atajos.
La principal divisa son las almas, ganadas después de matar a los enemigos. Vulgrim es el dueño de la tienda – además del servicio de portales gratuitos – que te permitirá comprar desde piedras para recuperar la salud y mejorar tu energía, hasta obtener nuevas y mejores habilidades. Es el gran argumento para patear todos los traseros que encuentres, así mejoras tus habilidades y te preparas mejor para algunos monos frustrantes más grandes.
Aunque tengas 14 horas de juego en la sangre con Darksiders, la batalla final puede ser algo poco climática considerando las habilidades que has adquirido y el tiempo que puedes gastar para adquirir una mejor armadura o más y mejores habilidades. O sea, no es necesario comprar todas las mejoras y estar armado al máximo si dominas a War de buena forma, pero te ayudarán bastante si tiendes a toparte con muchos enemigos. En otras palabras, algunos enemigos no necesitan mucho ingenio para matarlos, algo un poco decepcionante siendo un título con buenos puzzles. Después de terminado no hay muchos argumentos para volverlo a jugar, al menos que quieras completarlo al 100%.
Bienvenido al fin del mundo
Darksiders al parecer no aprovechó estos meses de retraso respecto a la versión de consolas, especialmente en algunos detalles que pudieron ser mejorados para hacer la transición mejor adaptada. Sin embargo, a pesar de todos sus peros en detalles, sigue manteniéndose como un buen juego de aventuras en el PC que deberías jugar, por lo menos, un fin de semana entero. Eso sí, al menos que lo hayas jugado en consola, no hay razón para volverlo a jugarlo en el PC, porque no te perderás de mucho.
Lo imperdible
- Fórmula de Zelda con ambientación madura
- Puzzles y enemigos son reales desafíos
- Mecánica de combate interesante y combinable
- Ítem pueden prestar gran ayuda sin sabes cómo y cuándo usarlas
- Las almas son una gran motivación para no evitar patear algún engendro
Lo impresentable
- Historia débil que pasa rápidamente a un segundo plano
- Controles de teclado complicados
- La exploración es aburrida si quieres volver atrás
- Sin configuración avanzada de calidad gráfica
- Varias otras inconsistencias menores
Bueno
…a pesar de todos sus peros en detalles, sigue manteniéndose como un buen juego de aventuras en el PC que deberías jugar.”