(cc) Langley Research Center
Las extremas condiciones del Planeta Rojo hacen muy difícil su exploración (un paso previo imprescindible para la llegada de astronautas). A pesar de ello, entre la observación orbital a través de telescopios y sobre todo con los datos que aún siguen emitiendo los vehículos robotizados Spirit y Opportunity vamos recibiendo nueva información sobre Marte.
Ahora la NASA quiere dar un paso más y proyecta el envío de un planeador al que ha denominado ARES (Aerial Regional-Scale Environmental Surveyor ), que también es el nombre griego del dios de la guerra, que los romanos conocían como… Marte.
El proyecto ARES lleva ya bastante tiempo dando vueltas como concepto, pero ahora ya ha pasado de la mesa de diseño a la creación de un prototipo de pruebas, superando algunos tests que buscan asegurar que pueda volar en la atmósfera marciana.
ARES es un avión robot propulsado por cohetes que sería lanzado a la atmósfera de Marte protegido por una aerocubierta que le protegería del extremo calor y rozamiento en su descenso, al igual que las anteriores sondas. A 32.000 metros de altura se liberaría y una vez desplegadas sus alas, a una altura de un kilómetro sobre la superficie, comenzaría su vuelo.
La vida de ARES consistiría en un vuelo corto, de apenas dos horas, pero con el que la NASA podría llegar a cartografiar hasta 1600 kilómetros de territorio marciano, en una zona especialmente dificultosa y desconocida: el hemisferio sur.
Un lugar que por sus características de terreno y alto magnetismo supone un verdadero enigma para los científicos de la agencia espacial. ARES buscaría además indicios de agua y tomaría lecturas sobre el magnetismo. Esto último es especialmente interesante por su implicación con los vientos solares y a la hora de establecer la localización para un asentamiento en el planeta.
Si las pruebas avanzan sin contratiempos, el ARES presentará su candidatura a una próxima misión a Marte.
Link: NASA Moves Ahed With Robotic Plane To Take Mars Exploration To The Skies (PopSci)