Hace muy poco les contamos acerca de la escasez de componentes para fabricar placas madre que había, situación que al parecer se ha extendido a otras empresas relacionadas con el rubro. Ahora le tocó a Intel, que estaría sufriendo de problemas para suplir la creciente demanda por sus procesadores móviles de la línea i3 a la i7, enfocados al área de los notebooks.
La causa de este problema tiene un solo culpable: Acer, la empresa ensambladora de PC’s, quienes se habrían entusiasmado tanto con los nuevos chips de la marca que pidieron grandes cantidades para ellos mismos. Se habla de que esta locura de Acer se ve motivada por la decepción que tuvieron con la plataforma CULV (Consumer Ultra-Low Voltage) de Intel, que ofrecía un consumo energético menor a expensas de un impacto considerable en el rendimiento, y que ahora apuestan a un mejor desempeño para sus portátiles.
Consecuencia de esto, Intel habría creado una suerte de lista de espera, donde se le daría prioridad a los encargos de grandes clientes tales como HP, Dell, Lenovo y Toshiba, los cuales no sufrirán de retrasos en las entregas de sus chips, mientras que por otro lado, ensambladores más pequeños como Apple sí podrían tener una demora mayor para obtener los apetecidos procesadores Calpella de Intel en sus equipos.
Esto significaría un duro revés para Apple, quien tendría nuevamente otro motivo para retrasar la actualización de los MacBook Pro luego de los problemas que tuvo con los chips NVIDIA, teniendo que enfrentar ahora un nuevo escollo que presuntamente les estaría poniendo Intel para refrescar de una vez por todas su línea de portátiles, hueso que ha salido bastante duro de roer.
Link: Intel notebook CPUs in tight supply, says sources (Digitimes)
