(c) Ron Kwok, NASA/JPL
Científicos de la NASA y de la Universidad de Washington en Seattle, han llevado a cabo el estudio más completo sobre el espesor y el volumen de la cubierta de hielo del Océano Glacial Ártico.
El resultado del estudio no puede ser más preocupante, debido a la dramática reducción del grosor de la cubierta de hielo durante los inviernos comprendidos entre los años 2004 y 2008.
Por primera vez desde que los investigadores han logrado registrar esta información, el hielo estacional ha reemplazado al hielo más antiguo de forma predominante.
El casquete polar ártico aumenta cada invierno en la medida que el Sol se oculta durante varios meses, con el consiguiente aumento del frío. Durante el verano, tanto el viento como las corrientes marinas provocan que parte del hielo fluya naturalmente fuera del Ártico.
Pero no todo ese hielo se deshace en verano, ya que existe una capa de hielo más vieja y gruesa que logra sobrevivir. Eso hasta ahora, que los científicos han logrado comprobar que la capa ahora es más delgada que antes y que el área de hielo que lograba sobrevivir de un año a otro se ha reducido en un 42%.
El problema es más complejo aún porque la disminución de esta capa provoca, a la larga, un aumento en el nivel del mar y una mayor cantidad de zonas de aguas abiertas en el polo; las que al absorber más calor producen que suba la temperatura del océano y se incrementen los deshielos.
Los investigadores atribuyen estos cambios en el grosor total y el volumen de los hielos del Océano Ártico al calentamiento global y a anomalías en los patrones de circulación del hielo marino.
Link: New NASA Satellite Survey Reveals Dramatic Arctic Sea Ice Thinning (NASA)