Todos los caminos que se están recorriendo en la ciencia espacial nos llevan a que probablemente los humanos vivamos en Marte, en un futuro no tan lejano. Recientes hallazgos de científicos británicos alimentan estas afirmaciones, ya que encuentran que en el planeta rojo hubo agua hasta no hace mucho tiempo.
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Diferentes teorías científicas encuentran evidencias para decir que Marte fue un reservorio de agua abundante en el pasado. Las pruebas parecieran ser las formas que se encuentran en su superficie, con esas líneas típicas de un terreno en el que hubo un lago o un mar.
Sin embargo, hay cuentas que no dan cuando se hacen los cálculos para señalar todos los elementos que hacen falta para que el vital líquido estuviese presente en el planeta rojo.
Para que existiese agua era necesario mucho más calor, una característica realmente imposible ya que el Sol, hace miles de millones de años, no emitía las mismas temperaturas que ahora y Marte está más lejos de la estrella masiva, de lo que está la Tierra.
Lo único que podría explicar que existió agua, es que la atmósfera de aquel antiguo Marte registrara una elevada cantidad de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono.
A pesar de esto, científicos del Investigadores del Imperial College London y la NASA, que aportó con los datos del rover curiosity que está en Marte, tienen argumentos para decir que, al menos en una región en especial, hubo agua hasta hace poco.
Los científicos encuentran signos de que había abundante agua en en una zona conocida como el cráter Gale de Marte (una cuenca de 154 km de diámetro justo al sur del ecuador) mucho después de que se pensaba que el planeta se había vuelto seco e inhóspito, según se lee en una publicación del Imperial College London.
“Los hallazgos tienen implicaciones para nuestra comprensión del clima cambiante de Marte, así como también para dónde buscamos ahora signos de habitabilidad”, dijeron en el sitio oficial del instituto universitario.
¿Qué encontraron los científicos en Marte?
De acuerdo con lo que explican en el Imperial College London, hallaron capas deformadas dentro de una arenisca del desierto que, argumentan, sólo podrían haberse formado por agua. Si bien están de acuerdo en que había agua, no están seguros de si existía como líquido presurizado, hielo o salmuera.
“La piedra arenisca reveló que el agua probablemente abundaba más recientemente y durante más tiempo de lo que se pensaba anteriormente, pero ¿mediante qué proceso el agua dejó estas pistas? Esta agua podría haber sido un líquido presurizado, forzado a entrar en el sedimento y deformándolo; congelado, con el proceso repetido de congelamiento y descongelamiento causando la deformación; o salobre y sujeto a grandes cambios de temperatura. Lo que está claro es que detrás de cada una de estas posibles formas de deformar esta arenisca, el agua es el vínculo común”, dijo el autor principal, el Dr. Steven Banham, del Departamento de Ingeniería y Ciencias de la Tierra del Imperial College de Londres.