En el Encuentro Nacional de Gobernanza de Internet, celebrado en Quito, Ecuador, Julian Assange apremió a “los países del sur” a crear sus propios buscadores y redes sociales para evitar el espionaje de Estados Unidos sobre sus telecomunicaciones. De acuerdo con el fundador de WikiLeaks, 98% de los datos del mundo son interceptados por el gobierno estadounidense, por lo que América Latina debería invertir más en este rubro “para alcanzar su soberanía”.
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Assange, quien lleva más de dos años asilado en la embajada ecuatoriana en Londres, participó vía videoconferencia en el encuentro organizado por el Centro de Estudios Latinoamericano en Comunicación. En su participación, citó a Rusia y China como ejemplos de países que se han opuesto fuertemente a la vigilancia de Estados Unidos.
Por ejemplo, recordemos que el gobierno ruso plantea que, a partir de enero de 2015, todos los datos personales de sus ciudadanos se resguarden en servidores dentro de su territorio nacional; o hablando del continente americano, el gobierno de Brasil, que busca evadir a EE.UU. mediante un cable submarino que lo enlace directamente con Europa.
El australiano ha estado últimamente muy activo en la discusión de la privacidad. En su último libro (Cuando Google encontró a WikiLeaks), Assange afirmó que el buscador permite a la NSA y al FBI el acceso a los correos electrónicos sin una orden judicial. Sobre Facebook, ha declarado que cada vez que publicas en esa red social “estás siendo una rata”.
Sin embargo, aunque la premisa de Julian Assange es muy válida, su postura apunta hacia una balcanización de la red: una fractura geopolítica entre las telecomunicaciones que le quitaría su naturaleza global a Internet. ¿Es ese el camino por seguir? ¿Es la única manera de preservar la soberanía que tienen los países sobre los datos de sus ciudadanos? Desafortunadamente, parece que para librarse del ojo vigía de Estados Unidos es la opción más viable.