En su forma clásica, un casco para ciclistas tiene la función de proteger la cabeza frente a posibles golpes derivados de un accidente. Sin embargo, un grupo de estudiantes busca realizar algo diferente, dando origen a este «casco inteligente» que además es capaz de detectar cuando el usuario sufre un imprevisto e incluso diagnosticar las consecuencias de aquello.
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Y es que al conectar el casco a un teléfono inteligente, se puede determinar si el ciclista sufrió un impacto fuerte y necesita atención médica, tras lo cual se llama automáticamente a números de emergencia. Para aquello, cuando el casco detecta un accidente se comunica mediante parlantes integrados con el afectado, preguntándole si necesita atención médica. Si el usuario dice que sí o no responde, el dispositivo entra en acción y envía datos de ubicación a quien sea pertinente.
Por otro lado, el casco también posee una serie de sensores que van registrando datos a medida que se avanza en el trayecto, por lo que en caso de un accidente, dicha información servirá como una «caja negra» para entender mejor la caída, lo que puede resultar útil para los doctores.
Y por si fuera poco, el micrófono y los parlantes integrados que posee el dispositivo para comunicarse con el usuario también sirven para llamar por teléfono con manos libres y escuchar música.
Como es de esperar, no hay información respecto a la disponibildiad del casco inteligente en el mercado, ya que el proyecto comenzó a finales del año pasado y es manejado por un grupo de cinco estudiantes, quienes realizan un programa de internado en Intel y reciben apoyo técnico por parte de la compañía.
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