La Agencia de Seguridad Nacional (NSA) está recolectando unos 5.000 millones de datos diarios respecto a la posición de teléfonos celulares alrededor del mundo, asegura el Washington Post, en base a documentos filtrados por Edward Snowden y entrevistas hechas por el periódico.
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Según se indica, la agencia puede rastrear los movimientos de individuos y buscar la relación entre las personas que están usando celulares (si se reúnen físicamente, por ejemplo), a través de una herramienta conocida como “CO-TRAVELER“. La agencia tendría datos de cientos de millones de dispositivos, dice el periódico, aunque su interés estaría en encontrar las relaciones escondidas entre personas que quizás podrían ser un peligro.
De este modo, el gobierno de Estados Unidos está rastreando a personas del mundo en reuniones privadas, visitas al doctor, en hoteles, casas y otros lugares. Como la NSA no sabe cuándo podría encontrar a un terrorista, lo recolecta todo – sin buscar a sospechosos o individuos específicos.
Aunque la NSA no rastrea la ubicación de estadounidenses intencionalmente, el Washington Post afirma que estos datos se recolectan igual de forma “incidental”. Los datos se captan desde los cables que conectan las redes globales de telefonía móvil, y que llevan datos de celulares locales y extranjeros. Así, se capturan frecuentemente datos de estadounidenses que viajan a otros países.
Según el periódico, la NSA obtiene datos de ubicación a través de 10 “indicadores de actividad de inteligencia de señal” o sigad. Uno de estos sigad opera con ayuda de algunos “socios corporativos” descritos con nombres clave, que administran “sistemas físicos” de la NSA para interceptar datos, que luego son solicitados por la agencia a las compañías.
El representante de la American Civil Liberties Union, Chris Soghoian, indicó que es muy difícil para las personas evitar este tipo de vigilancia. “La única manera de esconder tu ubicación es desconectarte de nuestros sistemas de comunicación modernos y vivir en una cueva”, dijo.
Tomar medidas como usar teléfonos desechables o encender el dispositivo sólo para hacer llamadas breves hace que un usuario se vuelva especialmente sospechoso para la herramienta CO-TRAVELER.
Link: The Washington Post