Extraer secretos desde un organismo del gobierno es bastante difícil, no por las dificultades técnicas de extraer los documentos, sino porque no debes dejar rastros. Cuando Bradley Manning extrajo desde computadores del ejército norteamericano los documentos del gobierno que posteriormente se filtraron a través de Wikileaks, lo hizo dentro de un CD cuya etiqueta afirmaba ser de Lady Gaga, entre otros soportes.
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Por su parte Edward Snowden, el administrador de sistemas que nos reveló el masivo programa de espionaje y recolección de datos del gobierno norteamericano, PRISM, extrajo los datos de una forma increíblemente mundana al contrastarla con las repercusiones de su filtración: Snowden extrajo miles de documentos del Departamento de Defensa norteamericano en un simple pendrive.
En estos momentos, los investigadores de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) tienen claro cuántos documentos Snowden extrajo de su red interna, y desde qué servidor. Si bien no lo han revelado públicamente, medios han informado que cuando Snowden dejó Hawaii para refugiarse en Hong Kong, se llevó cuatro notebooks que “le permiten ingresar a algunos de los secretos más altamente clasificados del gobierno norteamericano“.
Quién sabe que otros secretos tendrá en su poder Snowden del gobierno norteamericano. Al fin y al cabo, una representante estadounidense (equivalente a la figura del diputado) parte de un comité del congreso al que la NSA le informó acerca de su programa de recolección de datos luego de que surgió el escándalo afirmó que PRISM era solo “la punta del iceberg“.
Link: Snowden Smuggled Documents From NSA on a Thumb Drive (Wired)
