La nueva entrega del popular videojuego “Counter-Strike”, titulada, “Global Offensive” en su tradicional enfrentamiento entre cuerpos policiales y terroristas, permite al jugador dar vida a un miembro de ETA.
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Si bien nos les llaman directamente ETA, sino “Separatistas”, se deja entender claramente a quiénes representan primero por su vestimenta: Incluye la típica capucha blanca y la ‘txapela’, es decir, el sombrero o boina como vemos en la imagen que acompaña esta nota que es una captura de pantalla del siguiente vídeo:
Además, en la descripción de los “Separatistas”, los autores del videojuego terminan de aportar datos reveladores que nos recuerdan a ETA al especificar que se trata de una “facción minoritaria europea” que comete “actos atroces de terror con el fin de lograr su visión nacionalista” por un “deseo abrumador de autodeterminación”.
Así, en la nueva entrega de Counter-Strike que sale a la venta el próximo 21 de agosto y que estará disponible para PlayStation 3 y Xbox 360 y PC, los miembros del grupo separatista luchan contra una de las unidades antiterroristas más respetadas en el mundo el Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional francesa (GIGN), el grupo antiterrorista de elite francés.
¿Qué te parece la similitud de los “Separatistas” con ETA? Particularmente creo que es una forma de llamar a las cosas por su nombre el que hayan incorporado a la banda entre los grupos terroristas, por mucho que aseguren haber abandonado la actividad armada, lo que han hecho a lo largo de su historia no puede borrarse ni con todo el tiempo del mundo…
Ahora, quizás sí resulte incómodo para familiares de víctimas de ETA saber que hay jugadores de Counter Strike en el mundo intentando ganar la partida encarnando a un miembro de ETA, ¿no crees? Aunque no hay que exagerar, ya que es un videojuego y además da la clara oportunidad al jugador de ser parte de los grupos antiterroristas, así que ideologías de lado, se trata de un juego de acción y hay para todos los gustos.
Link: Un famoso videojuego permite ponerse en la piel de un miembro de ETA (El Mundo)
