Para millones de yonkis alrededor del mundo, no hay mejor manera de perder el tiempo que jugar al Angry Birds. ¿Pero por qué hacerlo cuándo un robot puede jugar por ti?
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Es tiempo que ganas para conquistar el mundo y además el robot no sufre quedándose atascado en un nivel cualquiera. Esa es la decisión que ha tomado Jason Huggins al crear su obra maestra: Bitbeambot
El robot viene equipado con un dedo servo-conducido con los que lanza los pájaros desde el tirachinas hacia los simpáticos cerditos (esas víctimas colaterales)
¿Analiza Bitbeambot la escena y escoge las mejores trayectorias para conseguir su objetivo? No lo sabemos, tampoco nos importa. Nos basta con verle jugar y esperar a que la rebelión de las maquinas.
Link: Robot that plays Angry Birds kind of defeats the game’s purpose (dvice)