Anteriormente te contábamos de nuestro viaje a Bogotá, donde Sony nos presentó sus nuevos lanzamientos relacionados con la línea Genezi y Wall. Sin desmerecer el resto de los lanzamientos de la japonesa, lo más importante que vimos allá fue el equipo top de línea con que la empresa apuesta a mantener el liderazgo en sistemas de sonido.
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Tuvimos un encuentro cercano con el FST-SH2000: Un equipo que ostenta el récord de ser el equipo de sonido comercial de consumo más potente del mundo. Esto, merced de incorporar parlantes de 3 vías que integran un woofer de 20 centímetros y un subwoofer de 38 cms. completamente metálicos.
La tercera vía la complementa un tweeter de 2,5 cms. Todo esto dentro de una caja de madera realmente grande: 70 cms de alto x 48 cms de fondo, conformando unidades de casi 18 kilos de peso que entregan fielmente los 2000 watts de potencia RMS que este equipo ofrece.
De buenas a primeras, su diseño intimida. Cuando fue develado, la sorpresa fue enorme, casi tanto como la envergadura desplegada para otorgar el espacio necesario de cara a la demostración.
La unidad central tiene unas asas que permiten favorecer su transporte. Es liviana, tiene un acabado que simula fibra de carbono en su parte superior y el típico plástico brillante en su tablero. Ese mismo que promete rayarse si lo manipulas con descuido.
A primera vista se encuentra una gran cantidad de botones que setean diferentes reglajes del sonido, incluyendo funciones de DJ bastante limitadas, aunque nunca pretenciosas, por lo que resultan suficientes para el entusiasta de las mezclas y modificaciones de la música que suena en la fiesta.
Sus controles son sencillos y accesibles tanto desde el control remoto como desde el panel principal. Destaca la enorme perilla de volumen ubicada al centro de la unidad, que en un color cromado y con enormes luces guía rojas recuerdan más a un tablero central de automóvil que a un equipo musical casero, lo que no deja de ser bueno.
Al frente encontramos dos entradas de audio RCA, reguladores de niveles digitales y analógicos, conexión para micrófono, una notoria pantalla que no resta protagonismo al conjunto, y el siempre añorado espacio para introducir un CD. Sí, introducir, pues el diseño prescinde de la bandeja.
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Excelente detalle es el eficiente sistema de amortiguación del CD en reproducción: En la demostración, y a pesar de la enorme vibración generada en la unidad central a causa de los parlantes a nivel máximo, la música jamás fue interrumpida.
En la parte trasera hallamos otras dos entradas de audio RCA, conectores para los parlantes, un potente ventilador, conexión para la antena FM, AM y otras cosas que, simplemente, ya son estándar en equipos de esta gama.
Y bueno, decir que a todo volumen este equipo es capaz de remecer las paredes del subterráneo de un hotel es poco decir. De paso, me voló los puntos negros y acabó con mi tránsito lento. No, ahora en serio… Acá hablamos de potencia que no se olvida de la fidelidad en el sonido.
La verdad sea dicha, quizás muchos puristas gusten de música a niveles más controlados, con un cuidado equilibrio entre gamas medias y altas. Sin embargo, el nuevo equipo de Sony lo hace bastante bien.
Convengamos que no es la definición que un audiófilo busca, pero es más que aceptable si tomamos en cuenta que no se satura ni en máximos niveles de exigencia, y ofrece una claridad envidiable en cada beat y en cada punch sin pérdida alguna. Mal que mal, el eje central de esta bestia es la potencia, y cada golpe del subwoofer es una promesa de fiesta… Promesa que cumple a cabalidad.
Ya fuera del evento formal, e inmersos en la fiesta de presentación, tuve la posibilidad de volver a echarlo a andar, esta vez con mucho ruido ambiente. La prueba era interesante, puesto que ahora podríamos comparar su potencia versus la del equipo de amplificación utilizado en la fiesta.
La sorpresa fue más que grata al notar que — al menos en el espacio donde estábamos con este sistema de sonido — toda la música ambiente virtualmente desapareció, dando paso a los poderosos acordes salidos de las enormes bocinas que ostenta el FST-SH2000.
Es cierto, un video no le hace justicia a la potencia real del equipo, pero ayudará a graficar de alguna manera lo que te trato de contar.
Lamento no haber tomado un video más largo, pero ya me estaba quedando sordo.
Como puedes ver, cada parlante tiene luces bicolores que siguen el ritmo de la música, ayudando a crear el ambiente apropiado para la fiesta en casa. No son luces muy potentes, pero tienen onda y otorgan una mayor presencia para el equipo… Ya no sólo con estímulos de sonido, sino también visuales.
Lo malo es que el cable que conecta las bocinas a la unidad central es más corto que el que provee de sonido a los parlantes. De este modo, cuando quieras separarlos más de un par de metros desde la fuente, no tendrás el efecto de iluminación.
Si tuviéramos que buscar un adjetivo para definir este equipo, lo más probable es que sea algo parecido a sorprendente. A esta altura, y entre tanta competencia fuerte viniendo de Corea del Sur en lo que a sonido se refiere, el FST-SH2000 se para un par de pasos delante del montón, y desde esa posición comanda el grupo de lo que veremos — y escucharemos — durante la segunda mitad de 2011.
Para desgracia de tu vecino, quien te odiará de por vida por meter ruido con este equipazo, el FST-SH2000 estará en tiendas a contar de septiembre junto con toda la linea Genezi en tiendas Sony Style, retail y negocios especializados de toda latinoamérica. Aunque pronto lo tendremos en nuestras oficinas para poder hacer mejores pruebas en un ambiente algo más controlado.
Como precio de referencia, este monstruo debería llegar a un valor cercano a CLP $349.990, unos USD $763 que no parecen tan inalcanzables si se trata de conseguir la máxima potencia que puedes encontrar en tiendas del retail… Al menos, por ahora.