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Chile: La historia de una detención y el absurdo del sistema judicial

Carlos Oliva pasó dos días detenido por algo que se había resuelto hace un año.

Ticket WWDC 2011: US$1600, pasaje a SF: US$1500, estar detenido por demanda de delito marcario por App iRedbanc: PRICELESS

Así publicaba en su twitter Carlos Oliva tras ser detenido en el aeropuerto cuando se preparaba a viajar a la WWDC de Apple.  Parafraseando a las conocidas publicidades de tarjetas bancarias, Oliva describía cómo su exitosa aplicación iRedbanc le llevaría a una vivir una pesadilla con nuestro sistema judicial.

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Hasta el año 2010, todo iba bien con la aplicación para iPhone que permitía obtener información acerca de la ubicación de los cajeros automáticos que en Chile son conocidos como Redbanc. La aplicación tuvo un peak en el terremoto de Febrero del 2010, cuando las redes de internet móviles fueron las escasas sobrevivientes de nuestra plataforma de telecomunicaciones, y los cajeros automáticos con dinero se convertían en una rareza.

iRedbanc había sido destacada en la AppStore de Apple, así como también por diversos medios de la prensa local (Cooperativa.cl, EMOL, La Tercera, EMOL TV, Wayerless). Incluso el año 2009, como empresa autora de la aplicación (idev.cl), se contactaron con la gente de Redbanc para solicitar información actualizada que permitiera mejorar la precisión de la aplicación, dado su popularidad. La empresa les envió la información solicitada sin ningún problema.

La historia cambió rotundamente empezando el 2010, cuando Carlos Oliva recibe una carta del tipo Cease and Desist de un estudio jurídico que protegía a la marca Redbanc. En ella se solicitaba dar de baja la aplicación. Tras meditar el asunto, Oliva decide eliminar la aplicación desde la AppStore y quitar cualquier referencia a su existencia. Así consta en el historial de la aplicación en iTunes, en donde aparece el registro de eliminación de iRedbanc con fecha 10 de Mayo del 2010.

Tras la eliminación de la aplicación – que es lo que solicitaba el estudio jurídico – Oliva es citado a declarar en tribunales como parte de la investigación de una querella criminal en su contra. En su declaración, Oliva indicó que la aplicación y toda referencia a ella había sido eliminada, dejando además su dirección, teléfono personal y correo electrónico en caso de que necesitaran contactarlo.

El sábado 4 de Junio del 2011 – más de un año transcurrido desde la eliminación de la aplicación y declaración en tribunales – Oliva se encontraba en el aeropuerto para abordar un vuelo que lo llevaría al sueño de cualquier desarrollador de aplicaciones para tecnologías de Apple: Asistir a la WWDC 2011.  Es ahí donde comienza una verdadera comedia de absurdos del sistema judicial chileno.

Detención

Oliva estaba con prohibición de salir del país por no presentarse a una citación con fecha 26 de Mayo, prácticamente una semana antes de su viaje.  Oliva se había mudado a la apacible ciudad de Quilpué a fines del 2010, y la notificación se la enviaron sólo a su domicilio antiguo en Viña del Mar, sin hacer uso de los otros medios de contacto que quedaron disponibles en el tribunal.

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Como parte del procedimiento, Oliva pasó unas 48 horas como detenido junto a delincuentes comunes, los que al contrario de lo ocurrido con este joven emprendedor, obtuvieron rápidamente su libertad.

De vuelta en el pequeño calabozo del Juzgado con los otros detenidos (los cuales estaban ahí por diversas causas: robo con fuerza, robo de auto, especies, domiciliarios, riña, estafa, tráfico, etc.) y donde al explicar mi situación incluso recibí una “Oferta de Trabajo” (… clonando tarjetas), le dan la libertad a la mayoría de ellos (se van a la calle). Aparte de mi caso, el único otro detenido que debió quedar en custodia de la penitenciaría para ser trasladado fue un joven detenido por ser requerido en una causa en Villarrica por daños menores (haber graffiteado un muro).

En la publicación de Oliva se puede ver el detalle completo de cómo “el sistema” lo trató. Guardando las proporciones, es fácil recordar historias como Expreso de Medianoche, una realidad que muchos pensamos como lejana:

El chaleco tenía además un par de tiras que bajaban desde la espalda para dar la vuelta hacia adelante por entre las piernas, cuyo objetivo era fijar e inmovilizar las (debidamente esposadas) manos a la altura de la cintura. Desafío extra: tratar de hacer uso del baño en esas condiciones. En ese estado pasé las siguientes horas, con dos detenidos más, sintiendo solo frío y hambre y haciendo un ejercicio que consistía en caminar siete pequeños pasos de un lado a otro de la celda y que ideé con dos objetivos: intentar capear el frío e inhibir algo de cansancio físico para tratar de dormir (fracasé en ambos).

[…]

Durante la noche comienzan a llegar móviles con cientos de detenidos – algunos en tránsito, otros con la nocturna – hasta que finalmente nos sacan del calabozo para ser trasladados a Valparaíso (esto fue cerca de la 1 AM). Nos quitan las esposas y chaleco, y a pesar del reinante frío a esa hora (que con las puertas del galpón abiertas era inescapable) se nos realiza una nueva inspección completamente desnudos. De vuelta a vestirse y con los famosos chalecos amarillos, pero esta vez con esposas de pies y manos.

Lamentablemente en estos casos lo que opera es “el sistema”, un ente que no responde ante nadie y opera en forma autómata. Ni siquiera se puede contar con las garantías que este sistema provee para proteger a las personas, ya que se trata de funcionarios que han sido prácticamente absorbidos por este ente:

Se nos presenta al abogado defensor y se nos consulta si tenemos algún problema en ser representados por él, ante lo cual ninguno de nosotros se opone. De haber sabido que la participación de dicho abogado durante la audiencia se iba a limitar a enviar mensajes de texto y guardar absoluto silencio, lógicamente lo hubiese rechazado.

Como parte del “sistema” también, no se sabe si finalmente la empresa Redbanc tiene que ver o no en el asunto, sólo se sabe que al menos en el año 2009 no tenía ningún problema con la aplicación. No me extrañaría que estemos frente a los clásicos casos de estudios jurídicos que operan como parásitos del sistema judicial, buscando dónde obtener dinero a través de recursos que son aceptables legalmente, pero no moralmente.

El broche de oro para esta historia es la resolución del tribunal: Que en un plazo de 30 días retire la App de la App Store y cualquier mención a ella desde el sitio web de iDev. Cosa que había ocurrido hace un año atrás.

El caso de Carlos Oliva seguramente no es el único, pero es al menos uno al que los amantes de la tecnología nos sentimos cercanos y por lo mismo solidarizamos con él.  También influye en ese apoyo el hecho de que Carlos Oliva haya sido uno de los pioneros llevando las tecnologías de código abierto al público masivo.  Por allá por el 2001, fue quien creó el famoso “Día de Linux” en el programa de televisión tvnauta de UCVTV.CL junto con un joven Sebastian Beeche.

Te invitamos a leer la versión completa de esta historia escrita por el mismo Carlos Oliva tras 48 horas de pesadilla.  Si quieres darle un mensaje de apoyo, lo mejor es hacerlo directamente en su publicación, o a través de twitter via @iDevSoftware.

Links:
¿Por qué hacemos lo que hacemos? Segunda Parte (historia completa escrita por Carlos Oliva)
Detienen a creador de iRedbanc cuando viajaba a la WWDC (wayerless.com)

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