Por alguna razón, hay muchos héroes huérfanos en el mundo de la ficción. Sin embargo, tenemos algunos ejemplos de papás que se han destacado en aventuras ficticias, ya sea por ser buenos padres para sus hijos, o todo lo contrario. En esta lista reunimos a algunos de estos papás que se han destacado en el cine, la TV y el mundo del cómic. Y si piensas nos faltó alguien, ¡puedes agregarlo en los comentarios!
PUBLICIDAD
Kyle Reese
El padre del legendario John Connor, sólo conoció a su hijo como un adulto, sin saber que era su hijo. Aunque nunca tuvo la oportunidad de ser un padre para Connor porque muere antes de que éste nazca, igual se hace muy amigo de él en el futuro, y siguiendo sus órdenes, viaja al pasado, donde conoce a la madre de John, Sarah. ¿Confuso, cierto? Al menos no es su propio abuelo, como Fry de Futurama. Reese es probablemente uno de los padres con la historia espaciotemporal más rara del grupo, pero entra en el ranking por haber dado su vida para que su hijo naciera y se convirtiese en el líder de la resistencia en el apocalítptico futuro de Terminator.
Jonathan Kent
Aunque el padre de Súperman es Jor-El, quien logró salvar a su hijo al saber que su planeta Krypton sería destruido, quién sabe qué es lo que habría sido de Kal-El si no hubiese sido adoptado por la familia Kent.
Lejos de asustarse y salir corriendo después de ver un bebé capaz de levantar un auto, Jonathan y su mujer Martha adoptaron al niño y le inculcaron valores de justicia y bondad que son lo que finalmente marcó el que Clark se conviertiera en un superhéroe. Por suerte, Kent crió a Clark en el campo, donde había grandes espacios para que pudiera correr, volar, disparar rayos láser… y de alguna forma terminar convertido en un periodista con anteojos hipernerds.
En los años 90, durante la saga de La Muerte de Superman (que había muerto a manos de Doomsday), el ex héroe de la guerra de Korea, Jonathan Kent, estuvo clínicamente muerto producto de un ataque cardíaco y en su experiencia Post Mortem pudo contemplar el alma de su hijo en medio de un funeral kriptoniano. Intuyendo que había gato encerrado se las arregló para alcanzarlo, desenmascarar a los kriptonianos que eran sólo demonios disfrazados, y convencerlo de que volviera, que todavía tenía trabajo que hacer. Segundos después recuperó el pulso y despertó gritándole a Martha: “Traje a Clark de vuelta, Ma”. Dicho y hecho, algunas semanas después Superman volvió con pelo largo y chasquilla.
Mr. Incredible (Bob Parr)
Aunque le cuesta adaptarse al mundo donde no se pueden utilizar los superpoderes, el señor Increíble da prueba durante la película Los Increíbles que su familia es su “mayor aventura”, como dice él. No debe ser fácil manejar a una niña invisible (Violet), un hijo superrápido (Dash), y un bebé que aparentemente hace de todo (Jack Jack). Pero lo importante es que ama a su familia, y que puede patearle el trasero a cualquier maloso que se le cruce, porque es un superhéroe de verdad.
Mr. Incredible se metió -y de paso a su familia- en un tremendo problema por su necesidad de reivindicar su naturaleza de superhéroe, terminando todos al borde de la muerte a manos de los soldados y máquinas de Syndrome. Por el lado positivo, esa experiencia los unió como familia y les enseñó a aceptar su propia naturaleza. Mal que mal, un buen padre se forja en la adversidad: quedar sin trabajo, luchar con robots gigantes, es todo parte de lo mismo.
PUBLICIDAD
Arthur Weasley
Cualquiera que haya visto las películas o leído los libros de Harry Potter conoce a Arthur Weasley, el padre de Ron y los cinco hermanos de éste. Aunque no tiene el mejor sueldo, Arthur y su esposa Molly se las arreglan para que todos sus hijos tengan lo que necesitan y sean felices, encaminándolos para usar sus poderes mágicos para el bien, además de mantener el relativo orden en medio del caos que causan sus hijos (especialmente los gemelos).
Como todo padre, demuestra su temple ante las crisis y en su caso, le toca sufrir mucho cuando su hijo Percy trabajó para el Ministerio de Magia y prácticamente se pone contra la familia. Pero la tenacidad paga y Percy termina por volver al redil.
De alguna manera, el corazón de Arthur Weasley es tan grande que no sólo basta para criar a su tropa de hijos, sino que de alguna manera es padre putativo de Harry una vez que su padrino Sirius Black pasa al patio de los callados.
Henry Jones
El padre del famoso profesor Henry “Indiana” Jones, tuvo siempre problemas para relacionarse con su osado hijo, desaprobando en ocasiones la arqueología un tanto violenta y extrema practicada por éste. Además llama a su hijo intencionalmente “Junior”, lo que molesta a éste inmensamente. Mantuvo una relación tensa durante años con Indiana hasta que ambos se embarcan en la búsqueda del Santo Grial y luchan contra los Nazis que intentan obtenerlo, lo que finalmente logra acercarlos. Pese a las apariencias, Henry Jones sí se preocupó por su hijo y fue un padre bastante liberal, lo que finalmente tuvo como consecuencia la formación del carácter de Indiana Jones.
En la mentada película logra derribar un avión simplemente asustando a una bandada de pájaros, y sorprende a Indiana citando a Carlomagno:
“Que mis ejércitos sean las rocas y los árboles, y los pájaros en el cielo…”
Por cierto, a nadie le consta que Carlomagno haya dicho eso alguna vez. En la práctica, se puede interpretar como un invento del guionista, o en una segunda lectura como que Henry Jones se inventa sus propias citas.
Darth Vader
Anakin Skywalker o Darth Vader es probablemente el peor papá de esta lista. Intentó matar a la madre de sus hijos, se transformó al lado oscuro y le cortó la mano con un sable láser a Luke. Tampoco nunca se amigó con su hija Leia, aunque para ser justos, nunca se enteró de que ella era su hija. Aún así, Vader conservó algo de amor paternal, y finalmente se redime al confrontar al emperador y salvar a su hijo del lado oscuro, como último buen acto en busca de limpiar su oscuro pasado.
Después de pasar 20 años en un traje que lo mantenía vivo pese a que Obi Wan lo dejó como colador -una vestimenta que simboliza la pérdida de la humanidad- invierte el simbolismo pidiendo morir viendo a su hijo con sus ojos humanos, lo cual representa la recuperación de su alma y por tanto la redención.
Goku
Goku es desordenado, comelón, y tiene una tendencia a estar muerto durante mucho tiempo, lo que no lo convierte en el padre ideal, aunque sí quiere mucho a sus hijos. Pese a que mandó a Gohan a entrenar con un alien verde a las montañas, y a Goten lo vio como dos veces en ocho años porque estuvo muerto toda esa parte de la serie, Goku siempre fue cariñoso con ellos, jugó con los dos y en ocasiones también entrenó con ellos. Más que nada, les enseñó cómo ser fuertes y defender al mundo de los extraterrestres que cada cierta cantidad de años llegan a tratar de destruirlo todo en el mundo de Dragon Ball, pese a los esfuerzos de su esposa Milk para que sus hijos fueran genios de las matemáticas.
En la saga Dragonball GT (que existió sólo para la TV) Gokú vuelve a ser niño y aunque es un poco extraño verlo como un crío 20 años menor que sus hijos, en realidad la edad mental de Gokú nunca sobrepasó los 8 años. En una breve encuesta entre los editores de FW, casi todos estaríamos dispuestos a tolerar un padre inmaduro si a cambio nos enseña a convertirnos en Super Saiyayin.
Estimados lectores, esperamos que les haya gustado este breve recuento de grandes padres de la ficción. Como han visto, son “grandes padres” porque son grandes personajes que por esas cosas de la vida tuvieron hijos, pero no todos ellos son buenos padres de la ficción. Cuando hay que salvar el mundo o encontrar el grial a veces los hijos pasan a segundo plano, por lo que no es raro que más de alguno de nuestros seleccionados sea en realidad un padre completamente disfuncional. Un consejo: si quieren encontrar buenos padres, mejor no busquen en la ficción, sino denle un abrazo al suyo el día de hoy.