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Tarso Genro (cc) – Roosewelt Pinheiro/ABr
Si hace unas semanas las autoridades brasileñas prohibió la venta de banda ancha a Telefónica, este martes se conoció otra decisión que podría castigar severamente a dos compañías tecnológicas por prestar malos servicios: Claro y Oi/Brasil Telecom.
Resulta que a través de la ley de los “call center”, el gobierno brasileño pretendía mejorar las prestaciones a los clientes y reducir la alta tasa de quejas. Debido a que las cosas no cambiaron, el Sistema nacional de defensa del consumidor optó por iniciar una acción judicial contra las dos empresas que más reclamos recibieron en el ámbito de la telefonía móvil y fija.
Lo notable del caso es que el ministerio de Justicia se puso del lado de los consumidores: “ahora se trata de una sentencia judicial y no administrativa. Pedimos la condena para que se refuerce el Fondo de los derechos difusos. O las empresas pagan o se adecuan a la ley”, dijo el secretario de estado, Tarso Genro.
Para que las transnacionales escarmienten, la multa que arriesgan Claro y Oi es de 300 millones de reales, unos 150 millones de dólares. Con ese tipo de correctivos, las empresas penserán dos veces antes de saltarse tan fácilmente las leyes. Además, el ministro anunció que otras compañías podrían recibir castigos similares, pues ninguna de las operadoras cumple con la normativa legal.
Link: Empresas de telefonia poderão pagar R$ 300 milhões por descumprir Lei dos Call Centers (Agência Brasil vía FayerWayer Brasil)